TEMA

PARTICIPACION DE LOS HERMANOS SERDAN DURANTE LA ETAPA MADERISTA


Los hermanos Serdán tuvieron una participación muy importante en la época maderista ya que cada uno puso de su parte y los tres estaban a favor del partido anti-reeleccionista.

Carmen abrazando las ideas revolucionarias y la causa anti-reeleccionista de Francisco I. Madero. Luchó contra la dictadura porfirista desde el Partido Anti-Reeleccionista.

En forma clandestina, Carmen dedicaba las noches a pegar propagandacontra la dictadura de Porfirio Díaz y a repartir pólvora y dinamita entre los inconformes. En sus actividades secretas tuvo el seudónimo de "Marcos Serratos".

La joven no limitaba su trabajo a estas tareas, ya que también elaboraba bombas y hacía transacciones para la compra de rifles y pistolas para proveer de armas a las fuerzas revolucionarias.

Los dos hermanos varones de Carmen Serdán, al tener la edad suficiente, se afiliaron también al Partido Anti-Reeleccionista, de modo que junto con su madre y sus dos hermanas luchaban por terminar con la dictadura de Porfirio Díaz.

Aquiles Serdán abandonó sus estudios para dedicarse al comercio. En su calidad de negociante, realizó frecuentes viajes hacia los vecinos estados, durante los cuales tuvo la oportunidad de hacer amistad con los obreros que laboraban en las fábricas textiles de Puebla, Tlaxcala y Veracruz, constatando las inhumanas condiciones en que realizaban sus actividades.

Aquiles tuvo una activa participación en 1910 durante la campaña presidencial de Francisco I. Madero y, al fracasar las aspiraciones presidenciales de éste, tuvo que emigrar a San Antonio, Texas, en los Estados Unidos, a fin de escapar a la persecución que se desató contra sus seguidores.

Máximo, por su parte, llegaría a ser Presidente de la Delegación en Puebla del Partido Anti-Reeleccionista.

En octubre de 1910, Carmen viajó a San Antonio, Texas, en donde se entrevistó con Madero y llevó fondos a su hermano Aquiles. Los hermanos Serdán recibieron la instrucción de iniciar la Revolución en el estado de Puebla el 20 de noviembre de ese año.

Poco después, Madero proclamó el Plan de San Luis, para llamar al pueblo de México a sumarse al movimiento revolucionario y los hermanos Serdán regresaron a México a continuar con sus actividades proselitistas.

Desafortunadamente el 17 de noviembre el Gobernador de Puebla, Gral. Mucio Martínez se entera del movimiento y ordena al jefe de la policía, Miguel Cabrera, que revise la casa de la familia Serdán Alatriste para contener el movimiento.

La familia Serdán también es informada de este hecho, así, en su casa se reúnen 16 de sus seguidores, y envían avisos a los miembros del movimiento, a los obreros de las fábricas que estaban inconformes para que inicien el movimiento el 18 de noviembre.

En la mañana del 18 de noviembre el jefe de policía, Miguel Cabrera, siguiendo las órdenes del gobernador Martínez, arriba a la casa de los Serdán con una orden de cateo.

Aquiles Serdán abrió la puerta y se encontró con Miguel Cabrera, quien le disparó sin acertar, como respuesta Aquiles disparó su rifle e inmediatamente mató al jefe de policía, de esta forma inicia el movimiento. El resto de los policías estaban desconcertados por los sucesos, así que fueron en busca de más policías para enfrentar el ataque. Mientras los Serdán con las personas que estaban en su casa, seguidores del movimiento, y quienes solamente formaban un reducido grupo de 16 personas, se parapetaron en la azotea de la casa para repeler el ataque.

La ayuda para los Serdán nunca llegó, pero sí los grupos de policías, quienes ocuparon la iglesia que se encontraba frente a su casa y las casas vecinas para atacar a los revolucionarios. En algún momento de la batalla Carmen Serdán salió al balcón de la casa a gritar arengas a sus seguidores, pidiendo ayuda.

Más tarde los revolucionarios que se encontraban en la azotea fueron acribillados, entre ellos Máximo que dirigía el ataque. Al saber que estaban perdidos Aquiles decidió esconderse en una excavación que estaba dentro de su casa y bajo del piso en donde guardaban las armas. Mientras tanto, las mujeres de la casa, Doña Carmen Alatriste, madre de los Serdán, Filomena del Valle, esposa de Aquiles y Carmen Serdán fueron llevadas prisioneras.

Aquiles estuvo escondido en esa zanja durante 15 horas, hasta que el frío le ocasionó una tos y al salir de su escondite los policías que estaban vigilando la casa le dispararon.

Aquiles murió y su cuerpo fue exhibido por orden del gobernador como muestra de escarnio en contra de los revolucionarios.

Ya iniciado el movimiento revolucionario del 20 de noviembre de 1910, Carmen Serdán ayudó a los revolucionarios y trabajó como enfermera en hospitales para ayudar a los heridos. Terminado el movimiento de lucha se retiró a la vida privada y murió en Puebla en 1948. En la actualidad existen diferentes edificios, escuelas, avenidas que llevan el nombre de estos hermanos, héroes revolucionarios que lucharon por sus ideales.